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    White Paper Finanbest: La necesidad de contar con una política de distribución de activos

    Aizkibel Rojo | febrero 11, 2021 | 0

    La selección estratégica de activos o asset allocation se considera la piedra angular de la gestión profesional de una cartera de activos financieros. Se trata de un concepto simple, la adecuada distribución de la cartera entre distintos mercados, por ejemplo, deuda pública, bonos corporativos, acciones, materias primas y otros. Cada uno sería considerado como una clase de activo diferenciada. Una correcta composición que se adecue a las necesidades y expectativas del inversor tiende a proporcionar, a largo plazo,  unos rendimientos ajustados a los riesgos que asume.

     

    Décadas de análisis realizados desde diversos ámbitos académicos y profesionales sobre cuáles son los determinantes críticos en la evolución de una cartera, han constatado la importancia capital de la política de distribución de activos o asset allocation, frente a otros factores como la selección de valores concretos o el intento de optimizar los momentos de compra o venta (market timing).

     

    La literatura financiera ha producido innumerables estudios en la historia reciente (Brinson, Hood y Beebower (1986); Brinson, Singer y Beebower (1991); Ibbotson y Kaplan (2000) en los que se destaca la importancia de asset allocation como factor clave en la rentabilidad de una cartera. La evidencia empírica demuestra que el asset allocation aporta entre un 70% y un 90% del resultado final de una cartera, cifra muy superior a la aportación proveniente de la selección de activos subyacentes. Las conclusiones son claras: el asset allocation o la distribución de activos es crucial para el desempeño de una cartera, por encima de la habilidad en la selección de valores del gestor o su capacidad real de poder anticipar movimientos del mercado.

     

    Esta reflexión nos lleva a contemplar los siguientes aspectos:

     

    1. Qué entendemos por clase de activo y cuáles debemos usar. Es esencial la diversificación, junto con una adecuada comprensión de la naturaleza de cada una de las clases de activos a utilizar, esto es, su comportamiento en distintas condiciones económicas y las correlaciones existentes entre ellos. La correlación es un término estadístico que indica la fuerza y la dirección de la relación y proporcionalidad entre dos variables, en el caso que nos ocupa, entre dos clases de activos. Una correcta diversificación permite un mayor control del riesgo a la vez que permite exponerse a un gran número de fuentes de rentabilidad.

     

    1. Cómo se combinan entre si las distintas clases de activos que previamente hemos seleccionado. En la década de los 50 comienza el desarrollo de la denominada Teoría Moderna de Carteras o MPT en su acrónimo anglosajón por la que Harry Markowitz recibiría el premio Nobel de Economía. Utilizando técnicas estadísticas como la media varianza daba respuesta al modo de combinar de forma eficiente distintos activos financieros. Con la creación de conceptos como frontera eficiente donde existan carteras que maximicen la rentabilidad esperada para cada nivel de riesgo, comienza un camino que seguirá desarrollándose posteriormente con notables contribuciones como el modelo de valoración de activos financieros o CAPM propuesto por William Sharpe en la década de los 60. Hoy existen modelos más avanzados, como el propuesto por Black & Litterman y desarrollos posteriores que mejoran sensiblemente los tradicionales problemas asociados al modelo de Markowitz, y que permiten asignaciones de activos más realistas.

     

    1. De todas las combinaciones posibles hay que buscar aquella que se ajuste a las circunstancias y necesidades del inversor particular. Mediante la obtención del perfil de inversor, evaluamos factores subjetivos como su tolerancia al riesgo y factores relativos a su capacidad de asumir riesgo, lo que nos permite aterrizar la combinación de activos más adecuada para cada perfil.

     

    1. Buscar los vehículos adecuados para invertir. La utilización de fondos de inversión es una manera eficiente de plasmar la distribución de activos propuesta a la vez que permite aprovechar las ventajas fiscales que estos instrumentos proporcionan a la persona física residente. La indexación permite en muchos casos tener exposición a las clases de activos elegidas con un coste muy razonable.

     

    1. Reajuste de la cartera y seguimiento. Con el reajuste se pretende mantener las proporciones de cada activo, que han variado como consecuencia del devenir de los mercados, asegurando que se mantiene el perfil de riesgo y la rentabilidad esperada con independencia de la evolución de las cotizaciones.

     

    La excelente rentabilidad obtenida en nuestras carteras en 2020, nos reafirma en la solidez de nuestro modelo. Seguiremos analizando en próximas publicaciones nuestro White Paper. Mientras tanto, puedes obtener aquí tu perfil de inversor, en tan solo 2 minutos y sin ningún compromiso.

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